Los modelos de predicción meteorológica no dejan lugar a duda, las bajas temperaturas que ya están padeciendo en muchos lugares de Europa tampoco. Estamos a las puertas de una nueva entrada de aire frío polar continental, que en los próximos días provocará un acusado descenso térmico en buena parte de la Península Ibérica y en Baleares. El tiempo invernal volverá a recrudecerse; las fuertes heladas y las nevadas en cotas bajas otean de nuevo en el horizonte, de cara sobre todo al próximo fin de semana y primeros días de la semana entrante.
Con esta nueva invasión de aire frío, el invierno 2009-10 se aupará definitivamente a la parte alta del ranking de inviernos más rigurosos ocurridos en el Hemisferio Norte desde finales del siglo XIX, momento en el que la Pequeña Edad de Hielo daba sus últimos coletazos. En cualquier caso, un solo invierno o una serie corta de ellos no sirve para extraer demasiadas conclusiones de tipo climático. A pesar de ello, la ocurrencia de un invierno “como los de antes” poco o nada ayudará a todos aquellos que tratan de explicar a la población desde la racionalidad –sin catastrofismos– que el planeta atraviesa una fase cálida singular que podría derivar en un calentamiento desbocado.
Volviendo a la situación que en los próximos días nos tocará vivir por España, a la vista de los mapas previstos podemos calificarla “de libro”, con el anticiclón siberiano bombeando aire muy frío sobre la Vieja Europa; un aire que empieza ya a llamar a la puerta de los Pirineos. Mañana miércoles esa imponente barrera montañosa hará de parapeto, pero a lo largo del jueves el aire frío logrará rebasarla y se extenderá por buena parte de la Península y también por Baleares.
Aprovechando los nuevos productos meteorológicos que desde hoy mismo hay disponibles libremente en la página web de AEMET, he tomado la salida del HIRLAM con la temperatura prevista en superficie para los próximos 3 días (miércoles, jueves y viernes) a las 13 horas (UTC).
Se aprecia bien cómo el desbordamiento del aire frío desde el NE al resto de territorio peninsular, tendrá lugar a lo largo del jueves (2º mapa), alcanzando la masa de aire su máxima extensión durante el viernes (tercer mapa). Las nevadas durante estos días se localizarán sobre todo en el extremo norte peninsular. No será hasta el domingo-lunes cuando la previsible llegada de una borrasca atlántica pueda dejar nevadas en amplias zonas del centro-sur peninsular, aunque hasta dentro de un par de días no se definirá bien dicha situación.